FESTIVAL NACIONAL DE MUSICA ALONSO MARIN

SEMBLANZA ALONSO MARÍN GUTIÉRREZ

SEMBLANZA ALONSO MARÍN GUTIÉRREZ

6 de abril de 2011 a las 16:35
Por Mónica Orozco
Periódico La Patria – Aquí Chinchiná- Abril 2 de 2011

Su muerte sorpresiva nos impide presentar una completa semblanza de su vida y obra. Este insuceso tan inesperado y rápido nos obliga a practicar a través de estas palabras unos de los principios de la comunicación y la actuación que también fueron lema del ilustre Don Alonso: “Lo bueno, breve, doblemente bueno”.

En su juventud, Don Alonso fue un destacado sacerdote. Brillantísimo por sus altas calidades intelectuales y por su fina y descollante oratoria, a través de la cual dejaba en evidencia su erudición, todo ello acompañado de su incansable labor social en favor de las comunidades, labor muy propia de un verdadero sacerdote o pastor. Llegó un momento en su vida en el cual tomó la determinación de retirarse de su sacerdocio. Posteriormente conformó su hogar con Doña Gloria y formó su familia con ‘Luisito’, así llamaba él cariñosamente a su hijo ingeniero industrial y músico, fallecido, con Ritica, también fallecida, con Tatiana, con sus nietos Sebastián y Valentina y, con su otro hijo, quien fue su monumento y gran obra musical: El Maestro Clarinetista Guillermo Alberto.

Estuvo vinculado al magisterio como educador, en el cual se pensionó, habiendo sido incluso vicerrector del Colegio Bartolomé Mitre.

Durante toda su vida cultivó las letras y las artes, particularmente de la música, de la cual no sólo fue un asiduo practicante sino un mecenas e impulsor. También fue filósofo y, por encima de todo lo dicho fue un gran humanista, verdadero seguidor y practicante de los principios cristianos. El fiel de su balanza siempre lo fueron el bien y la justicia. Su sonrisa bonachona, de maestro, de patriarca, aparecía cada que terminaba una charla en la cual a través de un chiste que él mismo contaba cerraba a manera de moraleja las enseñanzas que siempre solía impartir.

Fue Don Alonso hasta su muerte un permanente colaborador en las actividades religiosas de distintas parroquias de nuestra ciudad, director del Coro de Canto de la Basílica de Las Mercedes. También, Don Alonso fue uno de los artífices y el “Ideólogo en la sombra” del logro conseguido para el templo de Las Mercedes cuando éste fue erigido como Basílica. De esta gran obra nunca tuvo reconocimiento y sea éste el momento de hacérselo, pero fue que él tampoco lo buscó y ese nunca fue su propósito de vida. Esto, de paso, da cuenta de su vida ejemplar, austera, pulcra, sin ansias de figuraciones ni de reconocimientos humanos. Sencillamente esa su probada conducta fue el mejor testimonio de una vida llevada con verdadero amor, gastada con amor y en el amor, en función del bien hacia el prójimo. Definitivamente, como el mejor mensajero de Cristo, su vida fue un testimonio permanente de su presencia.

ALONSO MARÍN GUTIÉRREZ

Docente,Filósofo, Teólogo, Humanista, Músico, políglota, amante del trabajo social, de la niñez  y ejemplar padre de familia, nacido en el  Municipio de Chinchiná, en el seno de la Familia conformada por Luis Carlos Marín y Soledad Gutiérrez .

Estuvo vinculado al magisterio como educador en los Departamentos de Caldas, Risaralda y Cundinamarca. Entre su extensa actividad docente se destaca  su gestión como  vicerrector del Colegio Bartolomé Mitre (Chinchiná) y docente de los Colegio Bravo Páez (Bogotá) y Santa Teresita (Chinchiná).

A lo largo de su vida cultivó las letras y las artes,  principalmente  la música,  ejerciendo como Director del Coro de la Escuela Militar de Cadetes (Bogotá) y como compositor y arreglista de música para la iglesia e himnos, entre las que se destacan obras como  “Somos Tu pueblo Señor” y los  Himnos del Colegio Bravo Páez (Bogotá), Santa María de la Rávida y al Milagroso Señor Caído de Chinchiná, entre otros.

Fue un colaborador incansable  de las actividades religiosas de las diferentes parroquias del Municipio de Chinchiná. Desempeñó por varios años el cargo de director del Coro de la Basílica Menor Nuestra Señora  de las Mercedes y fue acompañante permanente en el ministerio de la música  en la Parroquia Nuestra señora de Guadalupe.

Entre sus obras más importantes para la comunidad chinchinense, se destaca su participación en el logro obtenido para el templo de Nuestra Señora de las Mercedes, cuando este fue erigido como “Basílica Menor”, al igual que su participación en la dirección de los conciertos de Navidad en el Parque de Bolívar, la realización de torneos deportivos y actividades navideñas en el Barrio Verdúm.  Su pasión por el arte, en especial por la música, lo convirtieron en mecenas e impulsor de realización de conciertos en Chinchiná por medio del proyecto Chinchiná Sinfónico y Festival de Música Alonso Marín.